El Plan Inmobiliario Madrid-Barajas desarrollará 562 hectáreas de nuevos suelos, que supondrán poner en el mercado 2,68 millones de metros cuadrados de edificabilidad, con un calendario de 40 años
Se trata del Plan Inmobiliario del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, que conllevará la inversión público-privada de 2.997 millones de euros. Es el mayor desarrollo inmobiliario de España, cuatro veces mayor que veces la Operación Chamartín.
Aena lleva trabajando en este proyecto desde antes de su salida a bolsa, y contempla el desarrollo de 562 hectáreas de nuevos suelos, que permitirán poner en el mercado 2,68 millones de metros cuadrados de edificabilidad a lo largo de los próximos 40 años.
La mayor parte de los terrenos irá destinado a desarrollar el mayor centro logístico de España, que unirá la actual zona de carga aeroportuaria del aeropuerto con el Corredor de Henares, una de las principales áreas logísticas de España.
Los terrenos destinados a estos usos sumarán un total de 257 hectáreas y 1,48 millones de metros cuadrados de edificabilidad, que se desarrollarán mayoritariamente durante los próximos 8 años, y que supondrán multiplicar por diez las zonas del aeropuerto destinadas a estos usos.
El rápido crecimiento del e-commerce y la necesidad de gigantes como Amazon o Correos de contar con grandes naves junto a la mayor puerta aérea de España, y a las puertas de Madrid, están detrás de la lógica de negocio de este movimiento dado por Aena, que no contempla el desarrollo de ninguna vivienda.
Así, esta parte del desarrollo se configurará como parques con servicios logísticos y de transporte integrales, contará con naves de carga en primera línea y almacenes de distribución, y su principal objetivo es dar servicio a empresas de comercio electrónico, biofarma y productos perecederos, entre otros.
En los siguientes ocho años se iniciará la segunda fase del plan, dirigida a completar los usos logísticos y, sobre todo, a desarrollar un nuevo centro de negocios, bautizado como Airport City, con sedes de grandes compañías como la propia Aena y su matriz, Enaire, además de cuatro hoteles que sumarán 900 habitaciones a la oferta de Madrid.
La superficie total reservada para estos usos es de 62 hectáreas, con una edificabilidad prevista de 652.000 metros cuadrados, el 90% de los cuales irá destinado a oficinas.
Estos edificios se ubicarán en una zona contigua a la Terminal T4, que se encuentra ya pre-urbanizada y que contará con un acceso peatonal a la terminal, además de estar conectada por transporte público (metro, cercanías y autobús).
Habrá también un centro de ocio y actividad comercial, con una superficie total 57 hectáreas, con una edificabilidad total prevista de 341.000 metros cuadrados y 298.000 metros cuadrados de zonas verdes.
La compañía ha dividido en tres lotes el concurso abierto para aprovechar su vasto patrimonio inmobiliario, plan en el que también está analizando llevar su sede a Barajas
Aena confía en convertir esta zona de ocio en un polo de atracción al aeropuerto por sí misma y, para ello, planea vestiarla con un área temática recreativa, centro comercial, oferta gastronómica, zonas wellness, museo aeronáutico y observatorios panorámicos.
«Es un plan ambicioso pero realista, perfectamente posible», ha señalado el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, durante la presentación del plan esta mañana, acto en el que también ha señalado que la tramitación urbanística de estos terrenos será ágil.
Los terrenos que forman parte de este plan se desarrollarán en régimen de concesión, ya que Aena seguirá siendo la propietaria de los terrenos, y está previsto que el próximo consejo de administración de la compañía presidia por Jaime García-Legaz inicie formalmente el proceso.
Fuente: Real Estate Press